Cuando decidí escribir sobre la masturbación, debo admitir que me emocioné mucho. Pero no me imaginé lo complicado que podía ser. Y no porque me considere una mujer de mente cerrada, sino porque la masturbación en sí, es un tema controversial y amplio, pero a la vez muy intrigante y cautivador.
Siempre he pensado, que para conocer algo a fondo, hay que empezar por sus orígenes, de donde proviene y su evolución a través del tiempo.
He divido la historia de la masturbación en cuatro etapas muy marcadas. No te preocupes, no lo haré ni muy largo, ni muy pesado y mucho menos con términos que no puedas entender.
Contenidos
La masturbación antes de Cristo
La masturbación u onanismo, es un acto tan antiguo como el hombre. Los primeros registros se han hallado en pinturas rupestres prehistóricas . También algunas Figurillas de arcilla que datan del cuarto de milenio a.C., que describía a una mujer masturbándose. Aunque son más comunes los hallazgos de representaciones de masturbación masculina del mundo antiguo.
Los sumerios y egipcios, culturas mas antiguas del mundo. En sus mitos y leyendas, tuvieron actitudes muy relajadas y positivas en cuanto a la masturbación. Los sumerios por ejemplo, creían que la masturbación podía incrementar la potencia sexual de un individuo (hombre o mujer). Mientras que en Egipto hablaban del dios Apsu, quien se dice se creó así mismo mediante la masturbación, saliva y lágrimas, y de esa forma dio vida a la Vía Láctea. Es por ello, que era muy común que las reinas egipcias, fueran enterradas con los objetos que necesitaran en el más allá, como ropa, peines y sus dildos (consoladores).
Si bien la masturbación era común en hombres y mujeres, y considerado como un obsequio de los dioses, siempre fue una actividad privada y muy personal.
La masturbación y la llegada del Cristianismo
Muchos estudiosos consideran que la masturbación llega a su punto de “rechazo máximo” con la llegada del cristianismo. Debido a que pasó a ser vista como un acto contra la ley de Dios, y la Biblia lo señala como “una profanación del cuerpo, que es el templo de Dios”.
Los primeros padres de la iglesia, se oponían a esta práctica del mismo modo que a cualquier tipo de sexo no reproductivo. Inclusive, enseñaban que la masturbación y otras formas de relaciones sin penetración, eran pecados peores que la fornicación, la violación, el incesto o el adulterio. Tal es el caso de Agustín de Hipona (350 – 430 d. C.), que sostenía que la masturbación y otras actividades sexuales no reproductivas eran pecados “antinaturales”, porque eran anticonceptivos.
El médico Samuel August Tissot publicó su libro L’Onanisme en el año 1760. Donde habla sobre los supuestos efectos negativos que podrían causar la masturbación. Dicho libro fue presentado como un trabajo científico y académico. E incluso, Kant, Voltaire y Rousseau, grandes ilustrados de esa época, hicieron eco de dichos postulados. Logrando que la masturbación fuese considerada como una enfermedad degenerativa y crear un temor casi universal.
En el siglo XIX se consideraba a la masturbación como una enfermedad, e incluso se hicieron dispositivos insólitos para evitar las erecciones nocturnas no deseadas.
En la misma época, ocurrió un fenómeno muy curioso: los médicos solían combatir la histeria femenina acariciando manualmente el clítoris de las pacientes, hasta que pudieran alcanzar el orgasmo, conocida en esa época como paroxismo histérico, puesto que consideraban que el deseo sexual femenino reprimido era una enfermedad. Este hecho dio origen al nacimiento de los vibradores.
La desestigmatización de la masturbación
Sigmund Freud aparece a finales del XIX y comienzos del siglo XX, quien reconoce que la masturbación podía tener efectos beneficiosos, como aliviar el estrés y evitar las enfermedades de transmisión sexual, pero advertía que podían causar trastornos neuróticos.
En el siglo XX, Los expertos comenzaron a descartar los argumentos de que la masturbación causaba trastornos físicos, pero muchos seguían manteniendo la creencia que conducía a trastornos mentales.
El sexólogo Walter Gallichan, afirmaba que la masturbación en las mujeres era la causante de la apatía y frialdad femenina. Es decir, que preferían auto complacerse que tener coito matrimonial. Incluso, a los niños que se les encontraba masturbándose, se les amenazaba, castigaba. Además, se les aterrorizaba con el supuesto de que se volverían locos o ciegos. En algunas ocasiones se les decía que les iban a cortar el pene o a coser la vagina.
Fue Alfred Kinsey y su grupo de colegas que en el año 1948, tras 15 años de investigación sobre la conducta sexual humana, publicó los resultados obtenidos. Donde se podía apreciar, que el 97% de los hombres y el 62% de las mujeres se habían masturbado alguna vez en su vida y alcanzado el orgasmo, considerando así a la masturbación como algo normal.
Esto causó revuelo y shock dentro de la sociedad machista de esa época, quienes veían “normal” las actividades sexuales masculinas, pero no aceptaban las conductas sexuales femeninas. Tanto fue el escándalo, que la iglesia levantó su voz de protesta, e incluso un Senador denunció al trabajo de Kinsey como parte de una conspiración comunista.
La masturbación en la actualidad
Después de la muerte de Kinsey, se llevaron a cabo muchos estudios, y ya para la década de los 70, la mayoría de estudiantes universitarios no creía que la masturbación les causara inestabilidad emocional o mental.
En la actualidad, aun cuando ya no se considera a la masturbación como una enfermedad, sino como un acto normal, todavía no es bien vista a los ojos de todos (ya sea por cultura, religión o mentalidad), a pesar de que existen estudios que demuestran que es saludable si se hace en la medida adecuada.
Cabe mencionar que en el último estudio Barómetro del Autoplacer 2019, realizado por la empresa Japonesa de productos sexuales “Tenga”, con una muestra de 10000 personas de diferentes países (entre ellos España), el 93% de los españoles afirmó haberse masturbado alguna vez.
Este estudio sitúa a España como el número uno en este hábito, por encima de ingleses, alemanes, estadounidenses y franceses.
Espero hayas aprendido sobre la masturbación en este breve resúmen sobre su historia.
Tengo una duda:
La iglesia realmente rechazaba la masturabación masculina o la toleraba mientras no se «malgastaba semen»?
Hola Alfredo: En realidad si rechazaba la masturbación, así como cualquier tipo de sexo no reproductivo, que de cierta manera era una forma de malgastar el semen.
Existe una historia bíblica que siempre fue narrada en contra de la masturbación «la historia de Onan», donde se habla del pecado de este al no querer fecundar a su cuñada viuda. Él tuvo sexo con ella pero se retiró antes de eyacular. Y como la Ley de Moisés dictaba que «cualquier persona que derramase su semen en tierra infértil lo estaba haciendo en el lugar incorrecto», lo «castigaron matándolo».
Hoy por hoy desde mi punto de vista me parece que aún estamos dominados tanto hombres como mujeres con tabúes con las creencias religiosas de prohibido ,malo,no tocar
Es terrible que algo tan natural tan personal tan gratificante sea prohibido.
Es un gran tema y te ánimo a que sigas escribiendo sobre este tema ¡
Concuerdo totalmente contigo Elisa. Cuando estuve investigando sobre el tema, me tope con una sorpresa sumamente desafortunada. Existen páginas actuales en donde hablan sobre la masturbación, pero de una manera tan desdeñable, que no lo pude creer.
Incluso, el mismo gobierno está en contra de que se pueda hablar de la masturbación en los colegios y/o escuelas, lo que me parece totalmente incorrecto. Ya que sabemos que es un acto natural y debe ser tratado dentro de los cursos de sexualidad.
Y si, obviamente voy a hablar más del tema, porque aún hay mucho por decir.
Saludos y muchas gracias por leer.
Respecto a que un gobierno entre a decidir cómo y cuándo se debe tratar este tema creo que no corresponde de forma unilateral. Hoy día en los colegios las actividades, lo sé por experiencia, no están supervisadas por especialistas. Hay temas delicados y no puede haber un choque entre padres que prefieren decidir que educación y cómo se les da a sus hijos. Dar por sentado que los padres no sabrán o no lo harán y por lo tanto es el Estado quien debe decidir, para mi, es un error.
Los niños no son pequeños seres idénticos, no sirve el mismo patrón para todos.
Dentro de las ciencias naturales si se debe enseñar todo lo relativo a la sexualidad pero de una forma biológica y natural. Ya se recoge en la declaración de los DDHH el derecho de los padres por encima del gobierno.
Hola Mercedes, creo que no expresé mi idea muy claramente. Cuando dije que debe incluirse «la masturbación» dentro del curso de sexualidad, no me refería a que les enseñe como masturbarse, sino más bien a que se les enseñe de manera «biologíca»(como lo mencionaste): que es, cuándo se da, que es una forma de autoconocerse y sobre todo se les enseñe que es algo natural.
Además, creo que hay formas de enseñar sin herir suceptibilidades, claro, todo esto bajo un consenso entre el gobierno y los padres.
Hola de nuevo Kathia. Yo ya tengo hijos que son hombres. En su colegio se les dio clases de sexualidad acorde a su edad y en casa yo les amplié la información. Podría contar una anécdota de uno de ellos muy simpática pero tan clara con lo que él sentía en su cuerpo con 8 años que el mismo dedujo el porqué a veces su pene se ponía erecto.
A partir de aquel día cada vez que veía en tv una mujer guapa y se le subía me llamaba para enseñsrmela.
Cuando hay naturalidad, todo va sobre ruedas.
Totalmente de acuerdo Elisa, la ignorancia y supersticiones de las religiones ha hecho tanto daño a las personas que toma mucho tiempo en reparar esos daños. Lo importante es tomar accion en liberarse proactivamente de estos venenos religiosos fanaticos.
Sin contaminar la mente de un niño podemos ver que a muy temprana edad se masturban. Dejan de hacerlo a la vista cuando sr les llama la atención para que no lo hagan. Creo que dar placer al propio cuerpo es algo natural y lógico. Como bien has escrito el tabú surge a raíz de la religión. Y se ahí cada estudio realizado difiere de uno a otro. Somos seres racionales y expresar la sexualidad en público nos resulta grotesco , es más placentero en la intimidad con la pareja o en Soledad con la masturbación.
¿Daños neurológicos? Lo veo exagerado. Podría ser si se hiciera de forma adictiva, de manera incontrolada y ya no por el placer, sino por la necesidad de hacerlo, como un trastorno obsesivo compulsivo. Entonces si que podría causar algún daño, como otras adicciones, pero opino que siempre de forma reversible.
En nuestra sociedad, la influencia religiosa, sigue existiendo. Personalmente creo que explorar y relajar nuestro propio cuerpo es algo natural dentro de nuestro espacio íntimo.
Como mencione en mi respuesta anterior, la masturbación es un tema de autoconocimiento. En los niños es la forma de saber que es lo que tiene y para que sirve( sin maldad o querer darse autoplacer). En los adultos es también averiguar y saber que es lo que nos gusta y de que forma. Porque cuando estamos en pareja, hay roces y masturbación mutua. Y que mejor manera de compenetrarse en pareja, que sabiendo exactamente que le gusta y como le gusta a la otra persona.
Pero es cierto, la influencia de la iglesia está presente(muchas veces de forma incorrecta). Y… mientras haya gente que avale y apoye estas ideas obsoletas y literalmente de la era medieval, muy poco se puede hacer.
Mientras, queda en nosotros, tratar de informarnos lo más que podamos, y si tenemos hijos, enseñarles que no es malo, ni dañino, si se hace en la forma y medida adecuada.
Totalmente de acuerdo Elisa, la ignorancia y supersticiones de las religiones ha hecho tanto daño a las personas que toma mucho tiempo en reparar esos daños. Lo importante es tomar accion en liberarse proactivamente de estos venenos religiosos fanaticos.
Pueden descargarse gratuitamente mi desmitificador libro sobre la masturbación femenina desde mi blog. TODO lo que se nos ha dicho sobre ella es FALSO.
https://jesusramosbrieva.blogspot.com.es/